CBD para la Fibromialgia | Opiniones, beneficios y dosis recomendada

La fibromialgia es un proceso de enfermedad complejo que es tan frecuente como poco conocido. La investigación sobre la fisiopatología está en curso y es probable que los hallazgos ayuden a identificar nuevas opciones terapéuticas para aumentar las existentes en la actualidad que aún son insuficientes para el cuidado de una gran población de pacientes. Una de las sustancias que está suscitando un mayor interés como posible terapia es el CBD o cannabidiol, un cannabinoide presente en el cannabis.

 

Aunque la investigación en este campo todavía es limitada, los resultados de los estudios más recientes remarcan el gran potencial que tiene el CBD para la fibromialgia y otras enfermedades. Uno de los objetivos más prioritarios en este sentido es conseguir demostrar los beneficios del CBD para tratar dolores crónicos como los que caracterizan a la fibromialgia.

Qué es la fibromialgia

La fibromialgia es un trastorno reumático no articular crónico provocado por la alteración del sistema nociceptivo y la activación del sistema de alerta. Uno de sus principales síntomas es el dolor musculoesquelético continuo y extenso. También suele causar sensibilidad a la presión en ciertos puntos anatómicos y alteraciones neuroendocrinas. La fibromialgia no se diagnostica fácilmente y los principales tratamientos existentes están orientados a paliar el dolor y mantener unos hábitos que favorezcan el alivio de los síntomas asociados a este trastorno.

CBD para la fibromialgia: ¿es útil?

El dolor crónico es uno de los desafíos que tienen aún por delante los investigadores que estudian la fibromialgia. En la actualidad, se está considerando el uso del cannabis como medicina alternativa en pacientes con este trastorno, ya que los ensayos clínicos han evidenciado las propiedades analgésicas, antiinflamatorias e inmunomoduladoras de varios cannabinoides presentes en el cannabis. Los más estudiados y prometedores hasta el momento son el CBD y el THC. Aunque todavía no existen estudios definitivos que confirmen la utilidad y la seguridad del CBD como medicamento para la fibromialgia, sí hay poderosos indicios de que puede ser un compuesto útil para elaborar fármacos eficaces.

La literatura científica existente incide en la necesidad de seguir estudiando el CBD con el fin de probar su capacidad terapéutica en diversas afecciones, entre ellas el dolor causado por la fibromialgia. El CBD puede convertirse en un gran aliado para aliviar los síntomas del dolor, el sueño y los trastornos del estado de ánimo en pacientes de fibromialgia. Sin embargo, faltan pruebas sólidas que respalden estos beneficios.

Beneficios del CBD para la fibromialgia

A juzgar por las distintos estudios que se han efectuado hasta el momento, el CBD podría tener los siguientes beneficios en el tratamiento de la fibromialgia:

 

• Alivio del dolor.
• Reducción de la dependencia de los analgésicos recetados.
• Reducción de los efectos secundarios provocados por los analgésicos recetados.
• Inhibición de la inflamación.
• Mejora del estado de ánimo.
• Mejora de la calidad del sueño.

CBD para fibromialgia: opiniones

Se han realizado diversos estudios sobre el uso de CBD entre personas que padecen fibromialgia. Según esta encuesta, la mayoría de las personas que sustituyen el uso de analgésicos por cannabidiol admiten una mejora de la salud, especialmente en lo que respecta a la disminución del dolor y la capacidad de descanso. Además, también experimentan menores efectos secundarios. En este otro estudio, los encuestados que afirmaron consumir CBD reportaron una mejora en muchos de los síntomas asociados a la fibromialgia. Esta mejora fue desde leve en algunos casos a muy significativa en otros.

Opiniones reales sobre el CBD para la fibromialgia

A continuación compartimos algunos testimonios de personas con fibromialgia que han tomado CBD para reducir el dolor y otros problemas relacionados. Nos cuentan su experiencia para que puedas valorar por ti mismo los beneficios terapéuticos del CBD:

Testimonio de Silvia

Empecé a tomar CBD porque quería probar alguna alternativa a los medicamentos más habituales para tratar la fibromialgia, ya que no me sentaban muy bien. El CBD me ha ayudado a sentir menos dolor y además he dejado de tener efectos secundarios, con lo cual lo recomiendo. Sin embargo, lo he hablado con conocidos que también sufren fibromialgia y no a todos les funciona. Lo mejor es probarlo para ver qué tal te va y ver si es una solución buena para ti.

Testimonio de Álvaro

El CBD ha supuesto un cambio en mi vida. La fibromialgia es una cosa que te acompaña siempre y los dolores son muy molestos. Consumir CBD ha calmado en gran medida los dolores y que pueda hacer una vida más normal. También soy consciente de que no todos los productos de CBD son igual de buenos y que no a todos los pacientes les hace el mismo efecto. Pero sin duda lo recomiendo.

Testimonio de Raúl

El CBD me ha ayudado como recurso extra en ciertas ocasiones. Yo tengo mi medicación recetada por médicos, pero como suelo decir… Toda ayuda es poca cuando se trata de reducir los dolores incapacitantes de la fibromialgia. Recomiendo tomarlo, pero siempre consultando con el médico antes de empezar, y más si ya estás con otra medicación. Él es el experto y será siempre quien te diga la mejor opción.

Testimonio de Sofía

El CBD me ha ayudado puntualmente a llevar un poco mejor el dolor y, sobre todo, a dormir mejor. Es un producto accesible que se puede comprar fácilmente. Lo más importante es que sea de calidad y tenga un porcentaje de CBD adecuado. También hay que mirar que no tenga THC.

Dosis recomendada de CBD para fibromialgia

La dosis recomendada de CBD depende de varios factores como el uso que se le vaya a dar, las condiciones físicas de quien lo toma y el porcentaje de CBD real que tenga el producto. Normalmente, se considera que la dosis máxima diaria no debería ser superior a los 150 mg, pero esto depende del peso de la persona y de las necesidades concretas que tenga. Lo mejor en este caso y lo que recomendamos desde Mr. Weed es que consultes con el médico qué dosis puede ser más efectiva y segura para tu caso, así como la frecuencia y distribución del consumo a lo largo del día o la semana.